Entrevista maestros Dojo Shorei-Kan
Jose M Mena. Fundador Yoga Marcial
1- ¿Qué arte marcial practicas?
He practicado diversas artes
marciales en bastante profundidad tales como Taekwondo, Capoeira, Haedong
Gumdo, Taichi Chuan y alguna más, pero desde hace ya varios años, fundé mi
propia disciplina marcial en combinación con el Yoga, disciplina que también
practico desde hace varios años. Todo ello, da como resultado lo que hoy en día
es mi firma y mi legado, el Yoga Marcial.
2- ¿A que edad comenzaste y por qué?
Empecé muy joven, con unos 10
años ya le quitaba a mi padre un nunchako de hierro e intentaba manejarlo a
escondidas. Mi primera clase de defensa personal me la dio mi padre, que
practicó muchos años Judo. Más o menos a los 12 años. Posteriormente ya comencé
a asistir a entrenamientos regularmente (2 o 3 veces por semana), de Full
Contac, que fue a lo primero que me apunté y que practiqué durante 4 años.
3- ¿Cuál es el significado de tu arte
marcial?
El Yoga Marcial es como un
gran poema japonés, un Haiku, ya que al unir dos conceptos tan aparentemente
distintos, la mente clasificadora que somos todos no puede catalogarlo en un
campo de acción concreto y la persona se hace una “idea” de lo que cree que es.
El Yoga Marcial es todo el campo de actuación que va desde un extremo (quietud
y concentración) al otro extremo (explosividad/fluidez y concentración) y en
todo ese amplio continuo, usamos técnicas que son procedentes del Yoga y
técnicas que son procedentes de artes marciales, y su combinación interdependiente
para formar secuencias de movimientos es lo más genuino del Yoga Marcial.
Igualmente en ese continuo podemos decidir “trabajar” en el extremo de la
quietud o bien pasar al extremo de la explosividad, donde obviamente el
objetivo sí puede ser el de la eficacia en las técnicas marciales. Pero por
encima de todo, en el Yoga Marcial, el objetivo es conseguir una armonía de
movimiento que sea indicativa de una gran capacidad de concentración. En cuanto
al significado literal, el escudo está compuesto por la letra sanscrita “Om”,
letra y sonido representativo del Yoga, y la letra coreana “Do”, así que puede
traducirse como la Vía del Yoga.
4- ¿Cuáles son los factores que lo
determinan?
Bueno, creo que esta pregunta
ya queda contestada con la anterior pero puedo extenderme un poco más. Yoga
significa unión, unión de mente y cuerpo, lo que diferencia a una escuela o
tradición de yoga de otra es el método en el que se basa para producir dicha
unión. El Yoga Marcial, se basa sobre todo en el movimiento coordinado con la
respiración, como hace por ejemplo el Ashtanga Vinyasa Yoga, pero con un grueso
de movimientos y técnicas más amplios que además, casi en el cien por cien de
los casos, responde a un porqué marcial (además de anatómico, psicológico y
energético).
5- ¿Por qué practicas esencialmente?
Esta pregunta es un poco
personal para mí que entiendo las artes marciales como mucho más que un
deporte. Y, por supuesto, como mucho más que un deporte de contacto. Como he
comentado anteriormente, comencé con el
manejo de los nunchakos siendo muy joven, pero con el tiempo llegué a tener
niveles de ejecución que me daban acceso a un nivel muy profundo de
concentración y eso me ayudó en muchos momentos posteriores, como por ejemplo
los exámenes. Posteriormente con la Capoeira llegué a esos mismos niveles de
concentración en movimiento. Algunos llamarían a esos momentos de concentración
de diversas formas dependiendo de si nos referimos a métodos japoneses, chinos,
indios, tailandeses.
En el año 1999 me lesioné
durante un entrenamiento de Full Contac ambas retinas, por lo que se me
prohibió de por vida la práctica de deportes de contacto. Mi añoranza por ese estado
de concentración, me llevó a acercarme al Taichi Chuan y al Yoga. Y así empezó
el proceso de creación de un método en el que no hay combate, que tiene toda la
carga marcial y que me permite ese objetivo, con la ventaja de haberlo
“ordenado” para poder trasmitirlo y que el alumno pueda “replicar” dichos
estados de concentración. Dicho sea de paso, el Yoga Marcial es un Yoga muy
exigente físicamente.
Así que, como siempre digo, siempre
he practicado, con maestro y sin maestro, con alumnos y sin alumnos, y siempre
practicaré, al final, el mejor testigo de tu evolución es tu propio cinturón.
6- ¿Por qué enseñas y qué es lo que más
te agrada?
Hoy por hoy, lo que empezó
siendo mi gran pasión, es también mi oficio. Además, enseñar cualquier
disciplina da la posibilidad de aportar algo a la vida de las personas que le
ayude a superarse a sí mismas y sus situaciones. El Yoga Marcial mismamente
surge de la necesidad de adaptarse a lo inesperado.
Estudié Psicología en la promoción de
2000-2005 y también ejerzo como tal, pero es interesante observar cómo el
ámbito de enseñanza a veces da un tipo de acceso a la persona más autentico que
la consulta, porque en la consulta existe todo un submundo de símbolos,
mensajes e interpretación que no todos los terapeutas logran derribar en la
persona y hacerle audible lo que le está ocasionando el problema. Ventajas para
mis alumnos que tienen dos en uno.
7- ¿A qué grupo de edad estas enfocado?
Tengo clases dirigidas a
niños/as de entre 6 y 12, otra dirigida a adolescentes y por supuesto horarios
para adultos.
8- ¿Qué significa para ti enseñar tu
arte marcial en cuestión?
Además de lo comentado anteriormente,
que es algo que obviamente me llena muchísimo, en mi caso está el añadido de
que el Yoga Marcial merece perpetuarse incluso más allá de mí, por lo que
también fundé AYMA, la Asociación de Yoga Marcial y Artes Alternativas, para
poder forma a profesores.
9- ¿Qué quieres trasmitir y a quiénes?
Pues creo que el mensaje
principal que puede trasmitir el Yoga Marcial no es muy distinto del que pueda
trasmitir otro arte marcial o corriente filosófica: la necesidad de los opuestos
para coexistir, la interdependencia que existe entre estos opuestos y la
comprensión de este concepto permite una adaptabilidad total en todo momento y
en los tiempos que corren, en los que parece que nada sale como se pretende.
Por tanto, cuanto antes se aprenda a no vivir en tensión porque “sólo estoy
tranquilo cuando todo está planificado y bajo control”, más capacidad de
adaptación desarrollaremos y de esto se pueden beneficiar desde los adultos que
padecen ansiedad porque se han convertido en el eterno planificador/controlador,
como los niños/as que empiezan a vivir en una sociedad centrada en la
competencia, pues aprenden que su estabilidad no esta en “controlar” si no en
una autoconfianza tan firme que no depende del resultado. Son conceptos muy
complejos y difíciles de explicar en pocas palabras. De todos modos, no quiero
inducir la idea de que en las clases de Yoga Marcial se hace algo parecido a
Psicoterapia. En la clase se hace el entrenamiento de las técnicas. Lo que
ocurre es que la buena práctica y la guía del profesor lleva todo lo mencionado,
anteriormente pero entre líneas.
10-
¿Qué quieres conseguir en tus alumnos?
Creo que queda contestado con
la pregunta anterior.
11-
¿Para qué sirve el arte marcial que impartes con respecto a la
sociedad?
También creo que queda contestado,
pero puedo extenderme. Vivimos en una época en la que todo se exige muy rápido,
en la que el resultado es lo que importa, y a nivel psicológico esto se traduce
como he dicho anteriormente en una tendencia a la anticipación, rumiación y en
general, ansiedad. Por todo ello, aquello que ayude a entender que en
determinadas cosas más control es igual a más tensión y que más tensión es
sinónimo de aumentar la probabilidad de que finalmente nuestro resultado no sea
el que queríamos, aportará buenas herramientas a los practicantes. Es decir,
estamos hablando todo el tiempo de autoconfianza por un lado, y de conceptos
muy frecuentes en las filosofías orientales por otro, el de concentración y
alerta serena.
12-
¿Qué problemas o situaciones pueden tener solución practicando tu arte
marcial?
La verdad es que el beneficio
va desde cuestiones puramente físicas como la mejora del equilibrio, la fuerza,
la agilidad, etc, prevención de enfermedades ya que estabiliza el sistema
hormonal, corrige malos hábitos posturales, mejora la eficacia en combate, y
por supuesto es una gran herramienta contra el estrés.
13-
¿Por qué se necesita tu arte marcial hoy en día?
Porque para muchas personas
el Yoga Marcial podrá aportarles un dominio del cuerpo y una concentración que
le dará la certeza de que su vida tiene sentido. Siento ser tan filosófico pero
es que el objetivo final del Yoga Marcial lo tendrá también que elegir cada
practicante, habrá quien sólo busque eliminar sus dolores de espalda, habrá
quien busque mejorar su flexibilidad o sus técnicas tanto de Yoga como de Artes
Marciales, y habrá quien desee desesperadamente librarse del estrés. Espero y deseo que
también haya quien encuentre en el Yoga Marcial su vía de expresión y de vida.
14-
¿Qué le dirías a las madres y padres, niños y niñas para que se
acerquen a practicarlo?
Que con la práctica del Yoga
Marcial, los niños mejoran su capacidad de atención sostenida, su
concentración, su autoconfianza, su postura, etc. Y, por qué no decirlo, al ser
un Yoga con tradición marcial, también aumentará el respeto a las normas, a sí
mismo y a los demás.